El presidente de Kutxabank, Mario Fernández, ha anunciado este sábado que ha dado instrucciones para que la entidad financiera suspenda de forma inmediata todos los procedimientos de ejecución hipotecaria, en tanto en cuanto se conozca la nueva regulación que afectará a los mismos.
La resolución dictada por el presidente de la entidad afecta a las hipotecas sobre primeras viviendas.
De esta forma Kutxabank, la entidad que acumula mayor número de hiptecas en el País Vasco se adelanta al resto de entidades hasta que se determine hasta dónde llega el cambio legislativo que estudian los partidos, y responde, además, a un clamor social contra los desahucios que se ha intensificado tras la muerte de Amaia Egaña, que se lanzó este viernes desde el cuarto piso de su vivienda justo antes de ser desahuciada.
Unas horas después del suicio de Amaia, miles de personas exigían en Barakaldo, localidad donde residía la fallecida, cambios en la legislación hipotecaria y apuntaban a las entidades financieras como culpables de la situación límite que viven muchas familias. De hecho muchas entidades financieras vascas han amanecido este sábado con pintadas en las que se les tildaba de "asesinos".
La entidad que preside Mario Fernández y que es el resultado de la fusión de las tres cajas vascas, BBK, Kutxa y Vital, suspenderá las ejecuciones hipotecarias de forma temporal hasta conocer los cambios legislativos anunciados por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que ha anunciado una moratoria para los desahucios, y por el líder de la oposición Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha asegurado que el objetivo es que nadie "se quede sin casa".
Kutxabank tenía en marcha un plan destinado a clientes de la entidad que estén sin trabajo y en exclusión social y que no puedan pagar la hipoteca.
El programa Etxelan, pionero en todo el Estado y dotado con 7 millones de euros de presupuesto, busca la inserción laboral de los afectados, es decir, se les ayuda a buscar trabajo, y permite que las familias puedan residir durante un plazo de dos años en viviendas de alquiler, cuya renta está subvencionada hasta en un 95% por Kutxabank.
Este plan, sin embargo, no era considerado suficiente por organizaciones como Stpo Desahucios, que siempre han exigido a la entidad la dación y pago y la suspensión de las ejecuciciones hipotecarias pendientes.
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